Ester 8:10 Y escribió
en nombre del rey Asuero, y lo selló con el anillo del rey, y envió cartas por
medio de correos montados en caballos veloces procedentes de los repastos
reales;
8:11 que el rey daba facultad a los judíos que estaban en
todas las ciudades, para que se reuniesen y estuviesen a la defensa de su vida,
prontos a destruir, y matar, y acabar con toda fuerza armada del pueblo o
provincia que viniese contra ellos, y aun sus niños y mujeres, y apoderarse de
sus bienes,
8:12 en un mismo día en todas las provincias del rey Asuero,
en el día trece del mes duodécimo, que es el mes de Adar.
8:13 La copia del edicto que había de darse por decreto en
cada provincia, para que fuese conocido por todos los pueblos, decía que los
judíos estuviesen preparados para aquel día, para vengarse de sus enemigos.
En nuestro estudio del libro de Esther, hemos aprendido que
los Judios de todas las 127 provincias del reino de Asuero "representaban
a todos los escogidos de Dios en todo el mundo. Los enemigos de los Judios se
tipifican como las personas no salvas que son contrarios a Dios y su pueblo.
En los versículos anteriores (Ester 8:10-13) nos encontramos
con una ley que ha sido dada, en la cual los Judios ahora puedrían luchar
contra sus enemigos y matarlos en el día 13 de Adar. Aquí hay una porción del
propio decreto, "... los Judios deben estar listos aquel día, para vengarse de sus
enemigos."
Una pregunta se ha
planteado, "si los Judios tipifícan a los elegidos, ¿cómo podrían entonces
tomar venganza de sus enemigos? ¿Acaso Dios no prohibe que su pueblo búsque venganza? Este es un punto
muy importante. La Biblia prohíbe venganza: tanto en el Antiguo Testamento como
en el N.T.
Levítico 19:18 No te vengarás, ni guardarás rencor a los
hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo.Yo Jehová.
Romanos12:19 No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino
dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo
pagaré, dice el Señor.
La verdad es que el hijo de Dios núnca debería buscar venganza contra sus enemigos. Si
nuestros enemigos nos insultan: no debemos insultarlos. Si nuestros enemigos nos golpean
en la mejilla: debemos poner la otra mejilla.
No tenemos ninguna opción para tomar venganza. Dios dice en Romanos "Mía
es la venganza, yo pagaré". El hijo de Dios debe dar lugar a la adecuada justicia de Dios a todas las injusticias. Dios
es el que pondrá todas las cosas en orden a su debido tiempo.
La única excepción a la regla bíblica de que no tenemos que
buscar venganza contra nuestros enemigos, es al fin del mundo. En el último día de
existencia de la tierra cuando el Señor regrese Él quitará a todos sus escogidos, de este mundo. Esto será un
golpe letal a todos aquellos que se oponen a Dios y su pueblo. Incluso en ese
momento el pueblo de Dios, personalmente, no tomará la espada y hara violencia a nadie, la venganza se hará de la
mano de Dios mismo. Pero el pueblo de Dios estará con él en en este juicio, y
en ese sentido estarán echando mano de sus enemigos para destruirlos.
A medida que tratamos de encontrar el significado espiritual
de la fiesta de Purim, podemos concluir
que la única razón justificable en que el pueblo de Dios puede tomar la
ofensiva y perseguir a sus enemigos (a parte de servir en el ejército, eso es
otra discusión que no vamos tratar aquí) es cuando Cristo regrese en el último
día del Juicio Final. La fiesta de Purim es una parábola histórica que vívidamente
muestra el cuadro de la imagen del Día del Juicio en sí para nosotros.
EL CLAMOR DEL PUEBLO DE DIOS
A lo largo de la historia en que los verdaderos creyentes,
han experimentado angustia, problemas de diversa índoles, y persecución por causa
de la Palabra de Dios. El clamor de ellos siempre a llegado a los oídos del Señor
y Como resultado El ha venido poderosamente a ayudar a su pueblo, y dar
retribución. Esto lo vemos en los versículos siguientes:
Apocalipsis 6:9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas
de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el
testimonio que tenían.
6:10 Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y
verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra?
Note en Apocalipsis 6:10 que el juicio está unido con la
venganza "¿Hasta cuándo ... no juzgas y vengas nuestra sangre en los que
moran en la tierra?" En esencia, entonces, el clamor que sale de los
muertos por la Palabra de Dios Es un clamor para que Cristo venga a destruir a todos los
enemigos de Dios sobre la tierra. O podríamos decir: que los elegidos claman a
Dios para que les ayude y les haga venganza de sus enemigos, sólo puede ser una
súplica al Señor Jesús por su venida al
el fin del mundo. En otras palabras, implorarando a Dios para que haga venganza sobre sus enemigos es el equivalente
a decir: "Ven Señor Jesús, ven pronto".
Hazme justicia de mi adversario
Con esto en mente, nos encontramos con una parábola muy
interesante en el evangelio de Lucas. Veremos que esta parábola se relaciona en
gran medida a los días de Purim en la que se ordenó que los Judios fuerán a
vengarse de sus enemigos. También veremos que esta parábola nos da información
acerca de nuestra situación actual en la
cual nuestra fé está siendo probada de una manera más severa. Vamos a leer los primeros
versículos del Evangelio de Lucas, capítulo 18:
1 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad
de orar siempre, y no desmayar,
2 diciendo: Había en una ciudad un juez, que ni temía a
Dios, ni respetaba a hombre.
3 Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a
él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
4 Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo
dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre,
5 sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré
justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia.
6 Y dijo el Señor: Oíd lo que dijo el juez injusto.
7 ¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman
a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?
8 Os digo que pronto les hará justicia. Pero cuando venga el
Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?
Si se ha sentido fatigado últimamente, es por una buena
razón. Estamos en un tiempo de prueba extrema. Aquellos que dicen ser
"elegidos" sus fé está siendo probadas de una manera que supera con creces a cualquier prueba anterior. El período de la
gran tribulación (que concluyó el 21 de mayo de 2011) fué un tiempo de prueba.Así
como Dios abrió las Escrituras, en cada
"nueva" doctrina, comenzó un período de prueba para los que oyerón, lo
que se proclamó. En primer lugar, el final de la era de la iglesia quedó a la
vista, después, más información salió mostrando que no había un lugar de
sufrimiento eterno llamado infierno . Varias doctrinas más salierón a luz.
Incluyendo que Jesús había hecho el pago por los pecados de su pueblo antes de
la fundación del mundo, y que lo que hizo en la cruz era sólo una demostración.
Con cada apertura de las Escrituras más y más creyentes empezarón a tener su fé
probada por la Palabra de Dios. Muchos fallarón. Pero este tiempo de prueba nos
ha llevado hasta el día del juicio en sí. El 21 de mayo 2011! Esto es lo que la
Biblia tiene que decir sobre ese día:
1 Corintios 3:12 Y si sobre este fundamento alguno edificare
oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca,
3:13 la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día
la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea,
el fuego la probará.
3:14 Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó,
recibirá recompensa.
Inesperadamente (por parte de los creyentes),el pueblo de
Dios no fué sacados de éste mundo. No pasó nada que el ojo físico pudiera ver. Pero todo
indicaba que el día del (21 de mayo) era el Día del Juicio. Asimismo, cinco
meses después, la fecha que el pueblo de
Dios suponía que sería el fin del mundo vino y se fué. ¿Por qué no sucedierón
las cosas como lo habíamos pensado? La respuesta es que el 21 de mayo se inició una época de prueba
intensa: un 'fuego' el juicio que está perfectamente diseñado por Dios para
probar la obra de cada uno de qué tipo es. Es decir, ¿ somos un verdadero hijo
de Dios por la obra de Dios en salvarnos solamente,?, o, no somos un verdadero
hijo de Dios. Este periodo de prueba está diseñado para hacer estas cosas
manifiestas.
LA PRUEBA DE FE PRODUCE PACIENCIA
Antes de regresar a la parábola de Lucas 18, que sería bueno
para aquellos de nosotros que esperamos pacientemente en el Señor su regreso, y
considerar lo que Dios tiene que decir
acerca de la 'paciencia'. Leemos acerca de esto en la epístola de Santiago,
capítulo 1:
1:2 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en
diversas pruebas, 1:3 sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.
Normalmente pensamos que la paciencia es simplemente esperar
un período de tiempo por algo que deseamos tener. Al igual que en este momento
tenemos muchos deseos de que venga Cristo, Él no ha venido, así que debemos ser
pacientes y esperar que se despliegue el
tiempo hasta que El llegue. Este es un
aspecto de tener paciencia, pero Dios está revelando algunas cosas adicionales
en relación con paciencia a través de este versículo en Santiago. Él nos está
diciendo que cuando nuestra fé se prueba esto desarrolla paciencia, "...
la prueba de vuestra fé produce paciencia." Para decirlo de otra manera,
con el fin de obtener el tipo de paciencia que de Dios tiene en vista es
necesario que la fé sea probada. Con esto en mente podemos entender mejor lo
que leémos en Hebreos, capítulo 10:
35 No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande
galardón.
36 Porque os es necesária la paciencia, para que habiendo
hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.
37 Porque aún un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no
tardará.
Nos encontramos con una declaración sorprendente en este
versículo, "habiendo hecho la voluntad de Dios". Como nos damos
cuenta de que "hacer" la voluntad de Dios es una cosa constante en la
vida del hijo de Dios, ¿cómo es que alguna vez podemos decir que hemos "terminado"?
De alguna manera, este versículo está hablando de un período de tiempo en el
que se ha cumplido la voluntad de Dios. Y luego de un período de tiempo
siguiente en el que es necesario esperar antes de recibir la promesa (nuevo
cielo y nueva tierra). No sabemos absolutamente a que se refiere a un período de tiempo antes de
la venida de Cristo, porque dice: "El que ha de venir vendrá, y no
tardará". En este contexto, Dios nos dice que tenemos " necesidad de
la paciencia". Una vez que se compara esta declaración con lo que leemos
en Santiago 1:3 vemos exactamente lo que Dios dice.
El Señor nos está instruyendo a que después de que el pueblo
escogido de Dios haya cumplido su voluntad y hayan traído el mensaje del Día
del Juicio a la atención de todo el mundo, entonces necesitarían paciencia (es
decir, que su fé esté a prueba) antes de recibir la promesa de Dios. Y, el
Señor nos asegura, que El vendrá en el momento adecuado de acuerdo a su línea
de tiempo (para obtener información sobre la línea de tiempo del 21 de mayo a
través de la fiesta de Purim, visite este enlace:
http://www.ebiblefellowship.com/archives/ 2011/11/13/esther-part-1 /).
Volvamos a la parábola de Lucas 18. Vamos a encontrar que
Dios ha escrito esta parábola sobre todo por lo que su pueblo vive en este tiempo en particular.
El tiempo después del Día del Juicio ha comenzado. Está escrito para el
beneficio del pueblo de Dios porque
actualmente están pasando por la pueba de fuego de su fe (por cierto, con seguridad podemos decir
que es una prueba de "nuestra" fe, pero también sabemos que si somos
salvos, esto es sólo por la fe de Cristo. El fuego pondrá en manifiesto si
realmente tenemos la fe de Cristo o no). Podemos ver en el primer versículo
cómo el Señor nos consuela en este momento:
Lucas 18:1 También les refirió Jesús una parábola sobre la
necesidad de orar siempre, y no desmayar,
Ciertamente en nuestros días muchos han sido abatidos y turbados. Sus almas están
cansadas de clamar a Dios. Algunos han considerado dejarlo todo lo relacionado
con Cristo. Las iglesias están todas corruptas. La verdad dificilmente se puede
encontrar. Puede ser que al hijo de Dios
le parece que está solo en éste tiempo. Y ha habido tal decepción. La Palabra
de Dios indicó claramente que el21 de
mayo sería el Día del Juicio. Y que el 21 de octubre sería el fin del mundo.
Sin embargo, estas fechas han ido y venido, aparentemente sin incidentes. La
burla del mundo. Las iglesias afirman
triunfo de que nadie sabe el día
ni la hora. Muchos formales hermanos están yendo por un erróneo camino
espiritual. Que está
sucediendo Señor? ¿Cuánto tiempo Señor? Cuando volverás Señor?
El Señor nos anima a todos a seguir orando, y no desmayar.
Así como leémos en el libro de Isaías:
Isaías 40:27 ¿Por qué dices, oh Jacob, y hablas tú, Israel:
Mi camino está escondido de Jehová, y de mi Dios pasó mi juicio?
40:28 ¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es
Jehová, el cual creó los confines de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con
cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.
40:29 El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al
que no tiene ningunas.
40:30 Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes
flaquean y caen;
40:31 pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas;
levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no
se fatigarán.
Con el fin de animarnos en este momento, el Señor Jesús nos
dá una parábola de una viuda en busca de venganza:
Lucas 18: 2 diciendo: Había en una ciudad un juez que ni
temía a Dios ni respetaba a hombre: 3 Y había una viuda en esa ciudad, y ella
vino a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
Dado que esta mujer está pidiendo al juez ser vengada de su adversario, rápidamente nos encontramos nosotros mismos
curioso de esta parábola y su relación con la fiesta de Purim. Un tiempo en que, históricamente,fué cuando a los Judios se
les dijo que estuviesen preparados para aquel día, para vengarse.
No se nos dice exactamente cuál era la situación con la mujer
viuda. Dios no entra en detalles acerca de quién era su adversario, o lo que
había hecho a ella. Pero al parecer, se trataba de un asunto legal, porque ella
llevó su caso ante un juez. El juez no era un hombre temeroso de Dios. Él era
un hombre perverso que no se preocupaba de la ley de Dios. Por lo tanto, por un
tiempo, no le trajo la justicia que ella
estaba buscando:
4 Y él no quiso por algún tiempo ...
Finalmente, el juez escuchó su caso y vengó a la viuda
debido a su persistencia en venir una y otra vez a él. En otras palabras, ella
le molestó tanto que decidió conceder su petición de venganza contra su
adversario.
... Pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a
Dios ni respeto a hombre, 5 sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le
haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia.
El Señor continuó diciendo:
18:6 Y dijo el Señor: Oíd lo que dijo el juez injusto.
18:7 ¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que
claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?
Jesús relaciona este caso de la viuda y de el jues injusto a
los elegidos de Dios que claman a él día y noche. Porque que claman los elegidos a Dios? La respuesta se encuentra en el proximo
versículo:
8 Os digo que pronto les hará justicia…
¡Venganza! El pueblo de Dios está clamando a Dios día y
noche por venganza. Así como la mujer viuda que constantemente estubo visitado al
juez injusto para que le haga venganza contra su adversario. Los elegidos de
Dios van al trono de Dios a rogárle insistentemente para que Dios les haga
venganza de sus adversarios.
Una vez más, tenemos que recordar que nunca es lícito a los
elegidos rogar que se les vengue de sus enemigos ----a excepción de la venganza que viene al fin del
mundo. La petición persistente de la mujer viuda de vengarse de su adversario es un cuadro que
Dios está usando para ilustrar que su pueblo clama por su regreso (y por lo
tanto, como resultado, será el día de la venganza).
El regreso de Cristo est á
en vista una vez que seguimos leyendo en Lucas 18: 8
Sin embargo, cuando el Hijo del hombre venga, ...
Antes del 21 de mayo 2011 el pueblo del Señor rogaba a Dios
para que él viniera en cumplimiento de su palabra. Por otra parte previo al 21
de octubre 2011 el pueblo de Dios estába clamando que él Señor Jesús viniera, pronto.
Pero Cristo no vino. El clamor de que
Cristo venga también puede ser visto como un ruego por venganza sobre los
enemigos del reino de Dios (aunque el pueblo de Dios no desea el daño de ninguna
persona. Sin embargo, en realidad, una vez que Jesús vuelva, el resultado será
la destrucción completa de todos los enemigos del reino de Dios).
En la parábola de Lucas 18 Dios está alentando a su pueblo que han estado clamando
día y noche por su regreso, a no desmayar, ni se fatiguen durante el período de
prueba de fuego que necesariamente tienen que pasar para probar su fe, sino más
bién a la persistencia de seguir suplicando al Señor por Su venida. Dios nos
asegura que Él vendrá. Pero él también
hace una pregunta muy reveladora a la conclusión de esta parábola:
... ¿Hallará fe en la tierra?
¿Por qué Cristo esta haciendo ésta pregunta en particular al
cierre de esta parábola? La razón es porque estamos en el momento del fuego de
las pruebas más imaginables. Es absolutamente necesario ser probado antes de
recibir la promesa ("tenéis necesidad de paciencia" la paciencia
proviene de "la prueba de vuestra fé"). La pregunta que Jesús le hace
a usted y a mí, y todos, es: "¿Tu fé (la fé de Cristo)podría soportar esta prueba de fuego? ¿O su fé sería
encontrada deficiente y se quemará? Entonces, cuando él venga "¿hallará fe
en la tierra"?